El bruxismo es un trastorno bastante común y en ocasiones difícil de diagnosticar. Es por ello que desde Druiz Instituto médico dental queremos explicarte qué es el bruxismo, por qué se produce y qué tratamientos tiene.
Hoy queremos hablarte de un enemigo silencioso y sigiloso de nuestra dentadura y mandíbula. ¿Conoces a alguien que aprieta la mandíbula o rechina los dientes al dormir? ¿O quizás te está ocurriendo a ti?
¿Qué es el bruxismo y por qué se produce?
El bruxismo consiste en contraer la boca y apretar los dientes, sobre todo al dormir aunque también puede darse durante el día, de manera involuntaria.
Se conoce como bruxismo primario cuando se rechinan los dientes sin una causa definida ni se desencadena por otros problemas médicos. Los pacientes bruxistas de este tipo son los más comunes y suelen presentar bruxismo por tensión, estrés o ansiedad.
Por otro lado existe el bruxismo secundario cuando se da por una causa concreta o cuando aparece asociado a enfermedades neurológicas como, por ejemplo, en pacientes epilépticos o con enfermedad de Parkinson.
El bruxismo da síntomas, provocados por la presión ejercida de manera constante sobre los dientes y la mandíbula, que pueden ser:
- Sangrado en las encías
- Llagas en la mucosa oral por mordedura involuntaria
- Dolores, tensiones y hasta contracturas musculares en la zona de los oídos, cuello o mandíbula
- Cefaleas tensionales
- En casos más avanzados puede haber acortamiento, desplazamiento dental, maloclusión o dientes desgastados por bruxismo
- En los casos más severos los músculos maseteros llegan a aumentar de tamaño y endurecerse, lo que puede modificar la forma natural de la cara dando una cara más cuadradaPor último cabe destacar que, al tratarse de un trastorno ligado al estrés, los bruxistas pueden padecer también problemas de ansiedad, trastornos del sueño, trastornos alimenticios o problemas posturales.
¿Quién puede padecer bruxismo?
El hecho de que una persona presente bruxismo puede ser debido a que:
- Sufre de estrés que, dependiendo del grado que sea, podrá provocar un bruxismo de mayor o menor intensidad.
- Le resulta difícil relajarse.
- No cuenta con buenos hábitos de sueño.
- Tiene problemas en el alineamiento de los dientes. El bruxismo puede darse como un reflejo corporal para intentar corregir el posicionamiento de los dientes. Independientemente de cuál sea la causa o grado de bruxismo, es un trastorno que suele ser complicado de diagnosticar ya que no presenta unos síntomas claros o no se reconoce como patológico. Es por ello que muchos casos se diagnostican en las visitas rutinarias al dentista.
Soluciones para el bruxismo
En los casos más breves, normalmente diagnosticados en la consulta rutinaria dental y donde las lesiones son mínimas, es posible que el tratamiento consista en que el paciente sea consciente de que aprieta los dientes y lo evite, además de que instaure hábitos para controlar el estrés y gestione correctamente las emociones como, por ejemplo:
- Realizar al menos una hora diaria de ejercicio físico
- Practicar yoga para relajarse, además de estirar la musculatura
- Mejorar los hábitos del sueño:
- Ir siempre a dormir a la misma hora
- No hacer actividades estresantes ni estimulantes antes de ir a dormir; preferiblemente reservar esas horas para actividades como darse un baño, leer o escuchar música relajante
- Cuidar la postura al dormir, al igual que el ambiente del dormitorio.
- Practicar técnicas de relajación como el mindfulness, pintar mandalas o la meditación.
En casos más avanzados donde el paciente presenta síntomas será necesario, además de lo mencionado anteriormente, implementar tratamientos adicionales para evitar que el estado empeore, aliviar los dolores y mejorar la calidad de vida y sueño del paciente.
Tratamientos
El tratamiento por excelencia es la férula de descarga. Bruxismo es síntoma de presión sobre la dentadura y la férula de descarga permite, tal y como su nombre indica, aliviar esas tensiones. Esta férula, fabricada a medida para el paciente, se coloca al dormir sobre los dientes y funciona recolocando la mandíbula para descargar fuerzas y relajar la musculatura.
Si el bruxismo ha generado alteraciones bucodentales puede ser que el paciente requiera de tratamientos de ortodoncia para corregir el alineamiento o posicionamiento dental, o bien de estética dental para reparar piezas dentales dañadas y mejorar la calidad y aspecto de la sonrisa.
Por último existen tratamientos que ayudan a aliviar el dolor muscular, siendo uno de ellos el uso de botox para bruxismo. Este tratamiento se emplea para relajar el músculo masetero, aliviando las zonas de máxima tensión de la cara y liberando la articulación temporomandibular.
Especialistas en tratamientos para el bruxismo dental en Burgos
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