Cuando hablamos de mal aliento o halitosis nos referimos a aquellos olores desagradables que salen de la boca, normalmente, de una persona adulta.
En ocasiones nosotros mismos detectamos nuestro propio aliento y nos damos cuenta de que aun llevando una higiene bucal adecuada, tenemos un aliento fuerte y desagradable.
Los factores que causan el mal aliento son varios:
1. Mala higiene bucal
Después de comer, se quedan restos de alimentos en la boca, alrededor de los dientes. Estos restos se descomponen y producen placa bacteriana y sarro, dando lugar a un olor desagradable que se traduce en mal aliento. Además puede ocasionar problemas de salud oral, si ésta mala higiene se prolonga en el tiempo.
La mejor forma de evitarlo es lavarse los dientes después de las comidas o, como mínimo, 3 veces al día, hacer uso de la seda dental o los cepillos interdentales 1 vez al día y usar el enjuague bucal de vez en cuando. Y ¡OJO! ¡NO DEBEMOS OLVIDARNOS DE LA LENGUA! La lengua es una superficie rugosa en la que se acumula fácilmente suciedad que debemos limpiar con el cepillo o con elementos específicos como el limpiador lingual.
Del mismo modo, en personas que tengan una prótesis dental, es esencial seguir una correcta higiene, ya que si no se limpia con regularidad las partículas de alimentos se acumularán y causarán mal olor.
2. Boca seca
La saliva ayuda a la limpieza de la boca porque elimina las partículas que causan el mal olor. Cuando hablamos de boca seca o xerostomía, hablamos de la sensación de escasa saliva en la boca que todo el mundo ha experimentado alguna vez. Esta afección contribuye al mal aliento, puesto que con ella se disminuye la producción de saliva. La boca seca aparece de manera natural durante el sueño, pero si es crónica, puede que sea causada por algún problema en las glándulas salivales o algunas enfermedades.
3. Infecciones en la boca
Son una de las principales enfermedades orales que las personas suelen padecer. Son provocadas por virus y bacterias que afectan a los tejidos bucales alterando la salud oral. Hablamos por ejemplo de caries, llagas bucales, enfermedad periodontal o de encías. Por otro lado, el mal aliento puede ser causado también, por las heridas quirúrgicas después de una cirugía bucal (implantes, extracción de dientes, etc.).
4. Alimentos y bebidas
Una de las causas del mal aliento que pasa desapercibido y está delante de nuestros ojos son los alimentos y las bebidas que ingerimos. Cebolla, ajo, especias, café, alcohol, etc. consumidos en abundancia se traducirán a un aliento con un olor desagradable.
5. Tabaco
Cuando se fuma, se altera la flora bacteriana de la mucosa oral y se produce menos saliva. La saliva ayuda a mantener el equilibrio de las bacterias presentes en la boca, a proteger las mucosas y a su limpieza, por lo que si no se produce la saliva suficiente, se genera el mal aliento. Además, el tabaco favorece la aparición de enfermedades orales y generales.
6. Enfermedades
Algunas enfermedades, alteraciones o afecciones de nuestro cuerpo, pueden provocar un aliento con olor particular.
7. Medicamentos
Algunas medicaciones tienen como efecto secundario la disminución de saliva, lo que provoca boca seca o xerostomía y con ello, mal aliento.
Expertos en salud bucodental en Burgos
En Clínica Dental dRuiz te recomendamos identificar las causas del mal aliento y erradicar el problema desde la raíz. No es recomendable recurrir a productos diseñados para combatir la halitosis, ya que no combaten la causa, solo enmascaran el problema de manera temporal.
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